FEMENINO, CASADA, CATOLICA, DEDICADA AL HOGAR.
AHF: PREGUNTADOS Y NEGADOS
APNP:SIN DATOS DE IMPOPRTANCIA
APP: CESAREA HACE 16 AÑOS, OSTEOSINTESIS EN TOBILLO DERECHO HACE 10 AÑOS, APROXIMADAMENTE SIN COMPLICACIONES, TABAQUISMO OCASIONAL.
PADECIMIENTO ACTUAL: LO INICIA HORAS ANTES DE SU INGRESO AL REFERIR QUE SUFRIO ACCIDENTE AUTOMOVILISTICO TIPO CHOQUE AL IR COMO COPILOTO EN SU VEHIDULO AUTOMOTOR SIN CINTURON DE SEGURIDAD Y SE IMPACTADOS POR VEHICULO TIPO TRAILER DE FRENTE, POSTERIOR A LO CUAL INICIA CON DOLOR INTENSO EN RODILLA DERECHA, AUMENTO DE VOLUMEN E IMPOSIBILIDAD PARA LA DEAMBULACION, NO REFIERE PERDIDA DEL ESTADO DE ALERTA, MOTIVO POR LO CUAL ACUDE A VALORACION TRAIDA POR PERSONAL PARAMEDICO.
A LA EXPLORACION FISICA SE ENCUENTRA ALERTA Y CONCIENTE CON GLASGOW DE 15. CRANEO Y CARA SIN DEFORMIDADES NI ALTERACIONES. TORAX Y ABDOMEN SIN DATOS DE COMPROMISO CARDIIOPULMONAR APARENTE. EXTREMIDADES TORACICAS SIMETRICAS CON FUERZA MUSCULAR 5/5 SIN DATOS DE COMPROMISO NEUROVASCULAR DISTAL
EXTREMIDADES PELVICAS ASIMETRICAS A EXPENSAS DE LA DERECHA LA CUAL SE ENCUENTRA CON DOLOR INTENSO A ALA MOVILIZACION PASIVA, E IMPOSIBILIDAD PARA LA MOVILIZACION ACTIVA, SE OBSERVA DEFORMIDAD EN TERCIO DISTAL DE MUSLO DERECHO Y TERCIO PROXIMAL DE PIERNA DERECHA CON CREPITACION Y DOLOR A LA PALPACION EN AMBAS REGIONES AFECTADAS, SIN DATOS DE COMPROMISO NEUROVASCULAR DISTAL AL MOMENTO.
Rxs: SE MUESTRAN A CONTINUACION.
R1. ELEMENTOS DIAGNOSTICOS RECOMENDADOS PARA LAS LESIONES POTENCIALMENTE ASOCIADAS.
R2. TECNICAS Y PROCEDIMIENTOS QUIRURGICOS ENCAMINADOS AL TRATAMIENTO DE ESTA AFECCION.
R3. COMPLICACIONES ASOCIADAS A LAS DIFERENTES VERTIENTES DE TRATAMIENTOS QUIRURGICOS.
R4. META-ANALISIS: RODILLAS FLOTANTES EVOLUCION A MEDIANO Y LARGO PLAZO.
NO OLVIDE FUNDAMENTAR SUS COMENTARIOS CON LA BIBLIOGRAFIA DEBIDAMENTE ACOTADA.
Limber Saavedra Antezana; Manejo quirúrgico de rodilla flotante en un hospital de urgencias; Acta Ortopédica Mexicana 2005; 19(5): Sep.-Oct: 200-206
ResponderEliminarLas fracturas de fémur y tibia ipsilateral conocida como rodilla flotante se presentan por mecanismos de desaceleración en traumatismos de alta energía y requieren un manejo multidisciplinario para obtener los resultados favorables para el paciente.
Objetivo. Conocer los resultados obtenidos con los diversos tratamientos establecidos en fracturas ipsilaterales de fémur y tibia en nuestro hospital. Material y métodos. Un estudio retrospectivo, longitudinal y descriptivo, realizado del 1 de enero de 2002 al 1 de enero de 2004, en el Servicio de Traumatología y Ortopedia del Hospital Central de la Cruz Roja Mexicana, cuyo objetivo es evaluar los resultados de los pacientes operados con rodilla flotante. Se incluyeron 14 pacientes, manejados con fijadores externos en un primer tiempo, y posteriormente con fijación interna definitiva diferida en segundo tiempo, todos del sexo masculino con edad de 15 a 73 años media de 44 y mecanismo de lesión más frecuente fueron de atropellamiento en vía pública. Al tratarse de traumatismos de alta energía, su manejo es complejo y la elección de la técnica, tipo de implante y una planificación preoperatoria adecuada, es fundamental para no tener secuelas, brindar una pronta recuperación y mejor calidad de vida a nuestros pacientes.
Resultados.Basados en la escala de Karlstrom y Olerud con seguimiento de 12 meses se obtuvieron en nuestro estudio 71.42% de resultados buenos en 42.85% y excelentes en 28.57%, los que se presentaron en aquellos pacientes con fracturas diafisarias, las de peor pronóstico fueron las fracturas intraarticulares. De éstos, 9 (64.28%) presentaron alguna complicación tales como: rigidez articular, infección, acortamientos e invalidez permanente, existiendo un paciente amputado.
Conclusiones. Basados en nuestra experiencia y en los resultados del presente estudio, recomendamos el manejo y estabilización inicial de rodilla flotante con fijación externa, así como osteosíntesis definitiva diferida, cuando las condiciones generales del paciente y estado de tejidos, así lo permitan.
Anaya R2
ResponderEliminarGonzález “Rodilla flotante. Resultados de tratamiento” Vol. 4, No. 3 Septiembre-Diciembre 2001 pp 99-102
Las fracturas ipsilaterales de fémur y tibia representan un problema terapéutico, debido a la severidad de las lesiones así como a la presencia de lesiones asociadas y a la complejidad que conlleva una “Rodilla flotante” como resultado de mecanismos de alta energía.
Se realizó en los servicios de Urgencias y Fracturas Expuestas del Hospital de Traumatología “Victorio de la Fuente” del Instituto Mexicano del Seguro Social de febrero de 1993 a agosto de 1996, un estudio longitudinal, retrospectivo, observacional de 67 pacientes con diagnóstico de fémur y tibia ipsilateral, en los cuales se realizó en el servicio de urgencias la estabilización neurológica y hemodinámica, iniciando esquema de antibióticos desde su ingreso en los casos de fractura expuesta, realizándose el desbridamiento quirúrgico y estabilización de una o ambas fracturas en forma inicial, y osteosíntesis primaria o diferida en el servicio de fracturas expuestas y polifracturados; se realizó aplicación de injerto óseo en aquellos casos con fractura expuesta.
En la época actual, la rodilla flotante continúa siendo a pesar del incremento en su frecuencia y modalidades de tratamiento un reto para el cirujano ortopedista, debido a la presencia de las múltiples lesiones asociadas y el alto riesgo de secuelas. En el manejo de este tipo de pacientes es indispensable la actuación de un equipo multidisciplinario, ya que es producto de mecanismos de alta energía, y que pone en peligro la vida y viabilidad del segmento afectado.
En nuestra serie observamos que con la estabilización primaria de las lesiones musculoesqueléticas mejoran tanto el pronóstico, como la rehabilitación y la reintegración del paciente a su medio biopsicosocial, encontrando resultados funcionales excelentes y buenos hasta en el 70% de los casos, y con índice de infección de sólo el 6% a pesar de tratarse en la mayoría de los casos de fracturas expuestas con daño severo a partes blandas.
Tratamiento, lesiones
ResponderEliminarasociadas y complicaciones
en las fracturas
homolaterales del fémur y la
tibia. "Rodilla flotante"
Alfonso Lugones, Martín Mangupli,
Horacio Galera, Paula Díaz Gallardo,
Ignacio Pioli y Bartolomé Luis
Allende
Sanatorio Allende
Rodilla flotante es un término
que describe las fracturas concomitantes homolaterales de la tibia y el fémur. Estas lesiones se relacionan con un alto número
de complicaciones potencialmente
mortales. Informamos nuestra experiencia en el tratamiento de este tipo de lesiones en un período de seis años, revisamos los resultados y los comparamos con los de labibliografía.
Materiales y métodos: Entre enero de
2003 y julio de 2009 se realizó un estudioretrospectivo, descriptivo y observacional que incluyó a 16 pacientes, 11 varones(68,7%) y 5 mujeres (31,3%), con una edad
promedio 38,5 años (20 a 70 años). Se
utilizó la clasificación de Fraser para rodillaflotante. Se evaluó la amplitud de
movimiento de la rodilla, el material
utilizado en la cirugía, las lesiones
asociadas, el tiempo de consolidación, las complicaciones y las cirugías
complementarias.
Doce de los 16 pacientes
(75%) presentaron lesiones asociadas. Doce pacientes (75%) recibieron tratamiento definitivo temprano y en los 4 restantes (25%) se realizó control del daño. El tiempo de consolidación de ambos huesos
promedió los 6 meses. Ocho pacientes
(50%) requirieron cirugías
complementarias.
Salinas R3:
ResponderEliminarDwyer. Floating knee injuries: long-term results of four treatment methods. SICOT (2005) 29:314.318
En la actualidad, el tratamiento quirúrgico con clavocentromedular ha sido considerado como la opción ideal para el tratamiento de fracturas ipsilaterales de tibia y fémur, en algunos países se ha estudiado la posibilidad de otros medios de fijación, este articulo se presenta un estudio de 124 pacientes en un periodo de 1987 al 2001, se estudiaron pacientes en un rango de edad entre 13 a 49 años , la mayoría eran producto de un trauma de alta energía, en solo 20 de los pacientes se ocupó tratamiento conservador, incluyendo en algunos casos fracturas expuestas grado i de Gustilo, así mismo en otros pacientes se utilizaron clavos centromedulares, delos cuales se obtuvieron en general buenos resultados excepto en fracturas expuestas grado III de Gustilo, también se utilizaron fijadores externos.
Surgical management of ipsilateral fracture of the femur and tibia in adults (the floating knee): postoperative clinical,radiological, and functional outcomes.Hegazy AM.Clin Orthop Surg. 2011 Jun;(2):133-9. Epub 2011 May 12.
ResponderEliminarLa rodilla flotante es una de las tantas lesiones musculoesqueleticas que se acompañan de complicaciones funcionales y lesiones asociadas.Bansal y colaboradores reportan los mejores resultados con el uso de fijacion rigida para ambas fracturas.La mayoria de este tipo de lesiones se relaciona con trauma de alta energia en accidentes automovilisticos, relacionado con el aumento del crecimiento poblacional. Aunque su incidencia aun no se ha dilucidado, la serie mas grande reporta 222 caso en un periodo de 11 años.
Entre las lesiones asociadas con este tipo de fracturas encontramos: lesiones asociadas en otro organo blanco, el compromiso de tejidos blandos, la exposicion osea, compromiso vascular y nervioso, lesiones musculoesqueleticas asociadas.
Actualmente el pronostico a mejorado por el uso de fijacion rigida de primera estancia y la rehabilitacion temprana.
Manejo quirúrgico de rodilla flotante en un hospital de urgencias
ResponderEliminarLimber Saavedra Antezana,* Humberto Luis Vives Aceves,* Raúl Muciño Maldonado,* Juan Carlos
Vázquez Minero,** Jesús Rodríguez,* José Luis Rosas Cadena,* Alejandro Bello González *
Hospital Central de la Cruz Roja Mexicana. Servicio de Traumatología y Ortopedia.
Las fracturas de fémur y tibia ipsilateral conocida como rodilla flotante se presentan por mecanismos de desaceleración en traumatismos de alta energía y requieren un manejo multidisciplinario para obtener los resultados favorables para el paciente.
El objetivo de este estudio fue conocer los resultados obtenidos con los diversos tratamientos establecidos en fracturas ipsilaterales
de fémur y tibia.
Un estudio retrospectivo, longitudinal y descriptivo, realizado del 1 de enero de 2002 al 1 de enero de 2004, en el Servicio de Traumatología y Ortopedia del Hospital Central de la Cruz Roja Mexicana, cuyo objetivo es evaluar los resultados de los pacientes operados con rodilla flotante. Se incluyeron 14 pacientes, manejados con fijadores externos en un primer tiempo, y posteriormente
con fijación interna definitiva diferida en segundo tiempo, todos del sexo masculino con edad de 15 a 73 años media de 44 y mecanismo de lesión más frecuente fueron de atropellamiento en vía pública.
Al tratarse de traumatismos de alta energía, su manejo es complejo y la elección de la técnica, tipo de implante y una planificación preoperatoria adecuada, es fundamental para no tener secuelas,
brindar una pronta recuperación y mejor calidad de vida a nuestros pacientes.
Basados en la escala de Karlstrom y Olerud con seguimiento de 12 meses se obtuvieron en nuestro estudio 71.42% de resultados buenos en 42.85% y excelentes en 28.57%, los que se presentaron en aquellos pacientes con fracturas diafisarias, las de peor pronóstico fueron las fracturas intraartipolicomplicación tales como: rigidez articular, infección, acortamientos e invalidez permanente, existiendo un paciente amputado.
The floating knee: epidemiology, prognostic indicators & outcome
ResponderEliminarfollowing surgical management
Ulfin Rethnam*1,4, Rajam S Yesupalan2 and Rajagopalan Nair3
Journal of Trauma Management & Outcomes 2007, 1:2 doi:10.1186/1752-2897-1-2
La rodilla flotante es una lesión compleja de la rodilla. El tipo de fractura, la cobertura cutánea y la asociación de lesiones hacen de esta lesión un reto terapéutico.
Se describe el manejo de 29 pacientes con lesiones de rodilla flotante manejados durante un promedio de 3 años. Tanto las lesiones de fémur como de tibia se manejaron usando diferentes modalidades Las lesiones asociadas fueron manejadas apropiadamente. El resultado final se determinó con el uso de los criterior de Karlstrom después de la unión ósea. El mecanismo de lesión fue en accidente de tráfico en 27/29 pacientes. Hubieron 38 lesiones asociadas. 20 de 29 pacientes requirieron de enclavado intramedular para ambas lesiones. Las complicaciones fueron rigidez de rodilla, no unión de tibia, infección superficial. El tiempo de unión varió desde 15 a 22.5 semanas para las fracturas de fémur y de 17 a 28 semanas para la tibia. De acuerdo a la escala de Karlstrom los resultados fueron excelentes en 15, buenos en 11, aceptables en 1 y pobre en 1.
Las lesiones asociadas en las rodillas flotantes (lesión abierta, Nitra-articular y conminución9 son factores pronósticos para la rodilla flotante. El manejo apropiado de estas lesiones asociadas, el enclavado intramedular de ambas fracturas y la rehabilitación posquirúrgica son necesarias para una buena evolución final.
Dr Ponce R3TYO
Manejo quirúrgico de rodilla flotante en un hospital de urgencias
ResponderEliminarLimber Saavedra Antezana,* Humberto Luis Vives Aceves,* Raúl Muciño Maldonado,* Juan Carlos Vázquez Minero,** Jesús Rodríguez,* José Luis Rosas Cadena,* Alejandro Bello González *
Hospital Central de la Cruz Roja Mexicana. Servicio de Traumatología y Ortopedia.
Dra. . Sánchez
Se denomina rodilla flotante (RF), a una combinación de fracturas diafisarias, metafisarias e intraarticulares de fé- mur y de tibia ipsilateral, entre la zona subtrocantérica femoral y la zona diafisarias de la tibia, con frecuencia se asocia a lesiones ligamentarias desapercibidas, lesiones vasculares y nerviosas e infecciones severas que pueden llevar a la amputación. Estas fracturas son el resultado de mecanismos de desaceleración por traumatismos de alta energía, ya sea por impacto directo sobre la extremidad o indirecto mediante mecanismos de rotación o fuerzas transmitidas por el pie o rodilla.
Se debe realizar una estabilización quirúrgica temprana mediante fijación externa con el fin de permitir efectuar procedimientos diagnósticos y movilización temprana del paciente y sus extremidades. El estudio preoperatorio, se basó en imágenes radiológicas anteroposterior y lateral de fémur y tibia, usando la clasificación de Fraser (Figura 1) de la rodilla flotante para establecer el diagnóstico y seleccionar el tratamiento.
Se realizó estabilización primaria de la rodilla flotante, con fijación externa en todas las fracturas, mediante estabilización uniplanar con fijadores externos AO de los cuales 10 pacientes (71.43%) con fijadores tubulares y 4 (28.57 %) con fijadores roscados.
En 10 pacientes (71.43 %) se realizó el enclavado centromedular, de los cuales en 8 fracturas de fémur con 3 fracturas tratadas con clavo retrógrado y en 5 fracturas anterógrado, y en 6 fracturas de tibia con clavo sólido. En 12 pacientes se realizó osteosíntesis con colocación de placa y tornillos, en 8 fracturas de tibia, y 6 en fémur de acuerdo a la personalidad de la fractura (Tabla 3 y 4). Todos los pacientes precisaron transfusión sanguínea. La complicación más severa fue 1 amputación supracondílea por lesión vascular, infección severa y lesión masiva de partes blandas. Los resultados funcionales y manejo postoperatorio del paciente con RF con seguimiento de hasta 12 meses se efectuó mediante la escala de Karlstrom y Olerud, Goran Karlstrom y cols,5 obteniendo en nuestro estudio 71.42 % de resultados buenos y excelentes divididos en 42.85% y 28.57% respectivamente.
Bahena r2
ResponderEliminarIpsilateral fractures of tibia and femur or floating knee
A. Elmrini . A. Elibrahimi . O. Agoumi . F. Boutayeb., International Orthopaedics (SICOT) (2006) 30: 325–328.,
Las fracturas ipsilaterales de femur y tibia son lesiones relativamente raras, pero con consecuencias criticas para la funcionalidad de la rodilla afectada, en este articulo se reportan 18 casos de fracturas ipsilaterales del femur y de la tibia tratadas en el Departamento de Ortopedia CHU Hassan II of Fez, en un periodo de 8 años (1996 a 2004) los procedimientos quirúrgicos utilizados fueron diversos entre ellos el mas recurrido fue el enclavado intramedular, el periodo de seguimiento promedio fue de 2.5 años, donde se examinaron 18 pacientes. Los resultaos funcionales fueron evaluados utilizando los criterios Schiedts dentro de los pacientes se obtuvieron 7 resultados excelentes (38.9%) 6 resultados buenos (33.4%) y 5 malos (27.8%), las principales complicaiones observadas en el estudio fueron lesión de arteria poplítea que terminaron en amputación, 2 casos de osteítis, una no unión séptica, un caso de sepsis, un acortamiento insignificante de 2 cm, 2 casos de varo, 3 casos de dolor residual y un caso de anquilosis de rodilla.
RANGEL R3
ResponderEliminarRev. Asoc. Argent. Ortop. Traumatol. vol.75 no.4 Ciudad Autónoma de Buenos Aires oct./dic. 2010
Tratamiento, lesiones asociadas y complicaciones en las fracturas homolaterales del fémur y la tibia. "Rodilla flotante"
Alfonso Lugones, Martín Mangupli, Horacio Galera, Paula Díaz Gallardo, Ignacio Pioli y Bartolomé Luis Allende
Rodilla flotante es un término que describe las fracturas concomitantes homolaterales de la tibia y el fémur. Estas lesiones se relacionan con un alto número de complicaciones potencialmente mortales. Informamos nuestra experiencia en el tratamiento de este tipo de lesiones en un período de seis años, revisamos los resultados y los comparamos con los de la bibliografía.
Entre enero de 2003 y julio de 2009 se realizó un estudio retrospectivo, descriptivo y observacional que incluyó a 16 pacientes, 11 varones (68,7%) y 5 mujeres (31,3%), con una edad promedio 38,5 años (20 a 70 años). Se utilizó la clasificación de Fraser para rodilla flotante. Se evaluó la amplitud de movimiento de la rodilla, el material utilizado en la cirugía, las lesiones asociadas, el tiempo de consolidación, las complicaciones y las cirugías complementarias.
Doce de los 16 pacientes (75%) presentaron lesiones asociadas. Doce pacientes (75%) recibieron tratamiento definitivo temprano y en los 4 restantes (25%) se realizó control del daño. El tiempo de consolidación de ambos huesos promedió los 6 meses. Ocho pacientes (50%) requirieron cirugías complementarias.
La rodilla flotante suele ser consecuencia de un politraumatismo. Las diferentes series publicadas refieren un promedio de 50% a 62% de lesiones asociadas en estos pacientes. El uso de fijadores externos temporales (control del daño) es una excelente opción terapéutica. El mejor tratamiento para estas fracturas es la estabilización temprana y definitiva, que permite la rápida movilización del paciente y disminuye los problemas sistémicos en los politraumatizados, así como las complicaciones asociadas con un período prolongado de permanencia en cama.
NE 3
MARTINEZ R3
ResponderEliminarVol. 36-N° 206 Abril-Junio 2001. REVISTA ESPAÑOLA DE CIRUGÍA OSTEOARTICULAR.Rodilla flotante. Revisión retrospectiva
de 24 casos. RUIZ ARRANZ JS*, QUEIPO DE LLANO TEMBOURY A**, GODINO IZQUIERDO M
Se realiza una evaluación retrospectiva de 24
pacientes tratados de fracturas ipsilaterales de fémur y tibia.
Solo en 7(29%) casos esta lesión no se acompañaba de otras
lesiones asociadas. Los resultados se han evaluado según la
escala modificada de Thorensen y cols. (1985). El tipo de fractura
fue muy polimorfo. Se realizó tratamiento definitivo de
ambos huesos en la urgencia en 5 casos, en 7 casos se hizo
tratamiento definitivo en tibia y provisional del fémur, y en 12
casos el tratamiento de urgencias fue provisional para
ambas fracturas. Los resultados finales fueron buenos en 16
casos (67%), regulares en 6 (25%) y malos en 2 (8%). La estancia
media de estos pacientes disminuyo, cuando se hizo tratamiento
definitivo en urgencias.
NE 3
R1 Campos
ResponderEliminarA. Martín Trenor. Traumatismos vasculares periféricos. REV MED UNIV NAVARRA/VOL 49, Nº 2, 2005, 24-31
En las extremidades las radiografías son importantes, ya
que algunos tipos de fractura en el tercio distal del fémur o
proximal de la tibia se asocian con frecuencia con lesiones
vasculares. En muchos casos el diagnóstico es obvio, sobre todo en
presencia de heridas profundas situadas sobre el trayecto de los
vasos o cuando se observa una franca hemorragia a través de
ellas. En otras ocasiones el diagnóstico puede no ser tan evidente
e incluso estar enmascarado por las lesiones asociadas.
La falta de pulsos arteriales en una extremidad traumatizada,
es el signo más frecuente de lesión arterial. Nunca debe
explicarse su ausencia por “espasmo” o enfermedad arterial
previa aunque ésta debe ser valorada, si es posible, con la historia
y el resto de la exploración. La falta de pulsos es indicación
para realizar una arteriografía. Sin embargo, en casi un
tercio de las lesiones arteriales persisten los pulsos por no estar
interrumpida por completo la luz arterial o por existir una buena
circulación colateral
Cuando existe sospecha de un traumatismo arterial la exploración
de elección es la arteriografía
rodilla flotante: estudios diagnostico: argentina 2002
ResponderEliminardentro de los estudios diagnosticos para la rodilla flotante, es de vital importancia iniciar con estudios de radigrafia simple, los cuales pueden ser desde una rx ap y lateral de rodilla, posterioremente, los estudios que pueden valorar mas ampliamente los trazos complejos de fractura pueden ser la tomografia computada, mas recontruccion de la misma, cuando se sospechan lesiones de nervios como en este caso de poplite o arterias popliteas se puede recurrir a estudios de arteriografia, angiotac y electromiografia. sin olvidar que el concepto de rodilla flotante es una lesion que se encuentra en diafisis proximal o metafisis de tibia y diafisis distal de femur